Cuando tenía ocho años vi una película muy vieja de amor y
ahí empecé a soñar. Soñaba que algún día iba a conocer a alguien tan guapo como
el actor, con esa sonrisa, y que me iba a besar con esa canción de fondo. Pero
tenía un problema, yo no era guapa como la rubia de la película. Entonces,
sabiendo que no iba a poder cumplir este sueño, seguí soñando.
Pero yo sé, sé que no soy guapa como la chica rubia. Sé que el chico de la
sonrisa bonita nunca se fijaría en mí. Sé que nunca nos vamos a besar con esa
canción de fondo. ¿Y si algún día el sueño se hace realidad? ¿Y si alguna vez
el chico de la sonrisa bonita también sueña con besarme con esa canción de
fondo? El problema no es si lo amo o no lo amo. El problema es por qué nadie me
ama a mí. ¿Por qué a mí no me puede pasar eso? ¿Por qué yo no puedo tener un
novio con esa sonrisa? ¿Por qué nadie me besa con una canción de amor de fondo?
Yo sé por qué. Porque no soy guapa. Porque no soy como las chicas de las que se
enamora un galán. Porque no soy sexy, no tengo el cuerpo ideal … ¿tu has visto
como es mi cuerpo? Nunca te gustaría alguien con mi cuerpo. Y a parte soy super
torpe, y no soy guay. Por ahí si me dejan hablar un rato soy interesante, pero
guapa no, ya sé que no. Las chicas tienen dudas, no saben si el chico que les
gusta gustará o no de ellas. Yo no tengo dudas. Yo sé, no les gusto. Nadie se
muere de ganas de partirme la boca de un beso. Una mentira, eso es el amor. Una
mentira con mucho marketing. Porque desde pequeñas nos hacen ver películas, cuentos,
historias de amor… nos hacen creer que el príncipe azul tiene los ojos azules,
existe ¿y sabes qué? (No existe.) Sí que existe, pero nunca se fijan en chicas
como yo. 132 veces vi esta película. De pequeña siempre soñaba con que algún
día me pase eso. Pero el amor que te muestran ahí no existe. La vida es una
porquería. Nadie ama de verdad, nadie ve ni escucha a nadie de verdad.
Nos disfrazamos, armamos personajes y vivimos amores de película copiando todo
lo que veíamos de pequeños. Como en las películas… la música suena de la nada,
un hogar a leñas de fondo y nos creemos que ese es el amor. El amor… todo gira
en torno al amor. Pero el amor es para unos pocos, para esos que pasan el
casting de galán y heroína. Para mí no, yo lo miro en películas nada más.